Hacía mucho tiempo que Diego decía que quería ir a hacerles fotos a los aviones. En realidad no es una tarea tan sencilla porque se tienen que dar varios factores. Para empezar debes vivir (o tener cerca) una ciudad no sólo con un aeropuerto sino también una ciudad lo suficientemente grande como para que los aviones pasen con bastante frecuencia. Ese aeropuerto también debe tener algún lugar pegado a él desde el que poder hacer fotos y por último debes disponer de cierto equpo fotográfico para la tarea. Si un teleobjetivo es más que recomendable pero no obligatorio (durante el PHWK hubo personas que hicieron fotazas y no tenían uno); una cámara tipo reflex sí que lo es ya que en este caso el mḿovil tiene demasiadas limitaciones para la tarea.
La idea de hacer un spotting de aviones en PHWK comenzó a tomar forma cuando Fran y Juan nos dijeron que conocían un lugar muy cerca del aeropuerto de Sevilla para poder hacer fotos. Todo acabó de zanjarse cuando Juanma Moreno vino a una de nuestras quedadas y nos comentó que es fotógrafo profesional y que se dedica a hacer fotos a los aviones. No podíamos dejar pasar la oportunidad de «aprovecharnos» de los conocimientos de los tres.
Antes del día de la quedada, Diego y yo fuimos al lugar que muy generosamente nos pasaron Fran y Juan. No fuimos una sino tres veces para comprobar qué podíamos hacer allí (y un poco por vicio también). La semana de antes llovió bastante así que la misma mañana del PHWK, en un ataque de paranoia volvimos a hacer el camino para asegurarnos de que era transitable. La carretera para llegar hasta el mirador es de barro y con algunos baches así que tuvimos bastante guasa en el grupo de Telegram sobre cómo ibamos a meter más de diez coches por allí.
Finalmente el día 22 y con una puntualidad que ya va empezando a ser la marca de PHWK Sevilla, salimos para el mirador. Cuando llegamos al sitio y desplegamos todo el equipo, Fran y Juan hicieron una breve introducción dándonos algunos consejos muy útiles a la hora de hacer fotos a aviones ya que no se trata de una fotografía al uso. Podéis encontrar algunos de esos consejos en el post que Juan redactó sobre el tema. El timing fue perfecto porque prácticamente nada más acabar la pequeña charla empezaron a pasar los aviones.
El mirador se encuentra a los pies de la pista 27 que en la que aterrizan la gran mayoría de los aviones del aeropuerto de Sevilla. A veces también aterrizan en otra pista más cercana a Sevilla Este pero eso sólo ocurre cuando hace viento y tod@s sabemos que es algo que no ocurre con mucha frecuencia en esta ciudad. De los veinte y pocos que éramos, la mayoría nunca había visto un avión aterrizar tan de cerca. El mirador en el que nos encontrábamos nos permitía ver los aviones acercándose desde lejos y pasaban justo por encima de nuestras cabezas cuando aterrizaban. También tuvimos la opción de bajar de la colina para acercarnos del todo a la valla del aeropuerto y hacer fotos a los aviones que despegaban.
Hay que decir que ver un avión acercarse a toda velocidad (y el consecuente ruido) para después de aterrizar a pocos metros de ti es un espectáculo digno de ver y muy recomendable tanto para los amantes de la fotografía como para simples curiosos. De hecho en el mirador en el que estuvimos muchas veces se puede encontrar no sólo gente con cámaras y objetivos espectaculares sino también a jóvenes que vienen a pasar el rato y a hacerse algún selfie y también a familias que traen a sus hijos e hijas para pasar la tarde.
Elegimos bien la hora y el día para hacer la quedada porque estuvimos muy poco tiempo parados entre avión y avión durante toda la hora y media que estuvimos en el lugar. Juan y Fran por su parte se dedicaron a hacernos fotos a nosotros y como podéis comprobar en la galería tuvieron resultados de lo más espectaculares. No pudo faltar la cámara 360 de Javi (RIP ya que poco después del phwk se quedó sin ella) que no dudó en levantar por encima de la valla del aeropuerto. Sorprendentemente nadie vino a reclamar nuestras cabezas por eso 🙂 Tenemos que decir que el riesgo valió la pena porque le salieron vídeos y fotos brutales de los momentos en los que los aviones pasaban por encima de nosotros.
Al acabar, como siempre, nos dirijimos a un lugar cercano para tomarnos algo e intercambiar impresiones. Este tercer tiempo ya es toda una costumbre en PHWK y a medida que los que asisten con regularidad nos conocemos más y cogemos más confianza cada vez se parecen más a unas copas con amigos.
Como siempre, nos gustaría dar las gracias a todos los asistentes y especialmente a las tres personas que nos ayudaron con sus consejos y su experiencia a montar esta quedada tan diferente. Esperamos veros a tod@s en la próxima quedada. Durante el mes de diciembre PHWK se toma un descanso para comerse algún polvoron pero os recuerdo que seguimos en nuestras RRSS y que en enero volveremos con una quedada muy solicitada y en la que seguro que nos lo volveremos a pasar pipa.
Gracias y ¡felices fiestas!
Galería de fotos
